AL MAESTRO CON CARIÑO

Es ese otro adulto en nuestra niñez y juventud que nos está recordando todo el tiempo qué tenemos que hacer, cómo portarnos, qué cosas decir y que también nos enderezó cuando nos pusimos porfiados más de alguna vez. Los profesores tienen eso, que es fácil transformarlos en una segunda figura paternal porque muchas veces nos entregan tanto cariño y enseñanzas que se nos llega a olvidar que no compartimos un vínculo sanguíneo. Y de esos profesores queridos, hay algunos que quedaron en la historia. Muchos de ellos con una faceta docente desconocida, otros recordados hasta la eternidad como maestros de todos. Hoy queremos homenajear a todos los profes por medio de algunos de los más importantes que ha visto el aula nacional.

VÍCTOR JARA

Un 28 de Septiembre nace en Chillán Víctor Lidio Jara Martínez. Y en este lugar al sur de Chile no solo nace uno de los cantautores más importantes de Chile y Latinoamérica, porque a Víctor además de apasionarle la música, también lo llenan otras expresiones artísticas. Así, a sus 24 años forma parte de la Escuela de Teatro de la Universidad de Chile donde estudia actuación y dirección teatral, con los años se transformaría en el artífice de obras como “Parecido a la felicidad” y “La Mandrágora” de Maquiavelo.

Esta experiencia le abriría la puerta para trabajar como DOCENTE en el ITUCH (El que hoy es el Teatro Nacional Chileno) lugar donde es reconocido por su conocimiento, sencillez y disciplina.

Otra arista de la vida de Víctor ligada a la educación es su esposa: Joan Jara. Joan es la fundadora de la fundación Víctor Jara, y además de haber sido profesora de Víctor en la escuela de teatro, hizo una tremenda contribución país como docente en temas relacionados al fomento de la danza.

GABRIELA MISTRAL

Lucila de María del Perpetuo Socorro Godoy Alcayaga, hija también de un profesor y nacida en Vicuña, es una de las profesoras más reconocidas e importantes de nuestra historia, su periplo comienza a los 14 años enseñando a leer a alumnos de una escuela llamada “Compañía Baja”. Por ahí un Premio Nobel podría aclararnos el panorama, o que su obra es enseñada aún en aulas de todo el mundo, pero su faceta de docente no tiene premios ni condecoraciones, más sí algunos reconocimientos como en el año 1923 cuando se le concede gracias a Gregorio Amunátegui Rector de la Universidad de Chile el título de Profesora de Castellano. Un dato menos conocido es de dónde extrajo el pseudónimo con el que se conoce hasta hoy: es una composición a modo de homenaje a dos poetas que ella admiraba; Gabriele D’Annunzio y Frédéric Mistral.

NICANOR PARRA

Académico a nivel superior, profesor de liceo y maestro de talleres literarios, el creador de la antipoesía también es profesor. Parra es considerado uno de los grandes influyentes en la literatura hispana, e incluso para figuras como Roberto Bolaño, Don Nicanor es uno de los mejores poetas de occidente. Y como usted debe saber, el talento viene de familia. Nicanor Parra es el mayor de la Familia Parra, reconocido clan con un amplio prontuario musical y artístico. En 1937 el mismo año que escribe su poemario “Cancionero sin nombre” se gradúa de la Universidad de Chile y comienza a ejercer como profesor en liceos de la ciudad de Santiago y en regiones. Parra además de ser un creador, inventor y docente, también ha sido galardonado con diferentes premios a lo largo de su carrera entre los que destacan el Premio Nacional de Literatura en 1969 y el Cervantes que le otorgaron en el 2011. Sin duda un hombre que ya grabó su nombre en la historia, al igual que su hermana Violeta.