La bandera más linda del mundo
¿Cuándo fue la primera vez que escuchó sobre un concurso internacional de banderas en el que la nuestra ganó el primer lugar? Seguramente, usted y yo crecimos con esta historia, así que este mes de la bandera nos encargaremos de revelar la verdad tras este mito.
Mas de alguna vez escuchamos a alguien decir “Chile ganó el concurso internacional de la bandera más linda del mundo”, cosa que a muchos les hincha el pecho de orgullo a pesar de saber poco el origen de esta historia, y otros tantos no logró convencer del todo. A todas esas personas de poca fe les contamos que efectivamente nuestra bandera fue considerada la más linda entre muchas otras, aunque la circunstancia tenía poco de “concurso internacional”.
La verdad es que en el año 1907 en la conocida revista Zig-Zag, se publicó la noticia de que nuestro emblema patrio había logrado derrotar a otros países en este campeonato mundial de banderas en Blakenberghe, Bélgica. Pero todo se trató de una especie de reunión de familias adineradas de la época y provenientes de distintos países que compartieron una tarde de fiesta y como es típico chileno, entre todas esas personas habían unos compatriotas. Fue en medio de este festejo que a alguien, y posible víctima de una tarde de celebración, se le ocurrió la gran idea de competir por quién tenía la bandera más linda. Ninguno demoró en entusiasmarse ante tan tentadora batalla, alentando a cada invitado a lucir la bandera de sus respectivos países y no pasó mucho tiempo para que nuestros representantes, la familia Rojas de Bachcker, alentaran a su pequeña hija para que se paseara frente a todos los asistentes alzando nuestro pabellón patrio. Fue tanta la ternura que inspiró la niña en los invitados, que rápidamente conquistó sus corazones y eso bastó para que nuestra bandera chilena fuera la ganadora de la tarde en este “Concurso de banderas”.
Si usted imaginó un campeonato mucho más profesional, con jueces, expertos y árbitros lo sentimos mucho, pero no se deprima, porque todos sabemos que no es necesario ningún concurso para darse cuenta que nuestra bandera chilena es la más hermosa, porque entre el blanco que representa nuestras montañas, el azul de nuestros cielos y el rojo de nuestra sangre, no necesitamos nada más para que en toda ocasión tomemos nuestra copa de Vino Gato y brindemos por ella.